23 días entrenando la Resiliencia: Día 15, José miguel botó la tarjeta payoneer
Aunque ustedes no lo crean, escribir 15 días consecutivos tanto para el blog como para instagram, ha sido un reto para mi. Normalmente todo lo que han leído, son mis procesos mentales (porque rara vez le cuento mis problemas a alguien). Tampoco soy de escribir las cosas que me pasan. Pero esta vez fue diferente.
Ayer le explicaba a alguien que la mejor manera de transmitir con todo y emoción lo que te está sucediendo, es escribirlo cuando las emociones están a flor de piel. Esa es la parte crucial de que un texto pueda transmitir a quien lee lo que estás sintiendo, tu miedo, tu rabia o tu felicidad. El truco está es en escribirlo de inmediato.
Como verán incluso las emociones que vemos como negativas, pueden traernos buenos resultados. Si no me creen, vean cómo se hizo famosa Adele con un disco que escribió inspirada en un despecho. Ha sido Bueno dejar que todo quede escrito. Para que me ayude a recordar los pasos que he dado, junto a las emociones percibidas.
Seguimos en una fiesta de carnaval de aceite
¿Pueden creer que el personaje no ha limpiado la cocina? No se la pierdan, es que de verdad Joe es el colmo del descaro. Hoy me he querido dar mi “gustico”, he cobrado y me antojé de una carnita con cebollas. Así que José Miguel ha ido al mercado a comprar unos bistecs para cenar, pero poquito porque el kilo de carne cuesta 15$.
Cuando he terminado de cocinar y nos hemos sentado a comer en la sala, adivinen quien salió del cuarto con un carón, sí, ese mismo, Joe. Pude notar su cara de desagrado que no le gustaba el olor a carne en la cocina (porque a Joe no le gusta la carne). Ha ido al cuarto de lavado (que está al lado de la cocina) olió la ropa, la bajo de la cuerda y se la llevó para su cuarto, con una cara de que algo no le gustaba.
No obstante, abrió la puerta de la sala que es básicamente la de la entrada y la ha dejado abierta. YA VA ¿QUE?, “mi alma m$rdit#, si vos que dejáis el baño hecho una piscina y la cocina una pista de patinaje en aceite, nadie te dice nada, me vais a venir a hacer cara de c#l% a mi porque hice carne y a vos no te gusta, vos si tenéis los testículos bien puestos”. Perdón por el francés, ustedes hagan como que no leyeron ninguna mala palabra.
¡Mira mira mira!, es que 😤. Ahhh, ¿no le gusta la carne? Mañana también voy a hacer otra vez, a ver qué va a hacer.
Se perdió la tarjeta payoneer en Euros
Muchos me han preguntado en reiteradas ocasiones, cómo siendo venezolana tengo para pagar en el extranjero. Me preguntan si tengo cuenta en divisas y no hay nada más lejos de eso. Infelizmente no tuve esa suerte 🍀 de abrirme cuenta en divisas. La realidad es que he sobrevivido con Payoneer. Desde el 2015 que me llegó mi primera payoneer estoy haciendo uso de ese servicio y desde que llegue a Europa, ahora uso transferwise y Monese.
Payoneer es el medio mediante el cual recibimos los pagos de Adsense. Por eso es súper importante en nuestro viaje. Hoy José Miguel fue a comprar algunas cosas al Mercado y volvió sin tarjeta. Se percató de que no la traía ya cuando habían pasado las 11pm y el centro comercial donde hizo las compras 🛍 ya había cerrado.
Una búsqueda sin resultados
Tan pronto pusimos el cuarto patas arriba en la búsqueda, José Miguel se devolvió a recorrer sus pasos. Caminó hasta el centro comercial a ver si la había dejado caer en el camino. No la encontró pero tampoco recordaba nada. Luego pensamos que probablemente la había dejado en el mercado. Lo cual no nos tranquilizó del todo pero nos está manteniendo en neutro porque si perdemos esa tarjeta, es un problema tener otra de vuelta.
Esto básicamente porque payoneer solo te envía a tu dirección en tu país de residencia. Si dices que estás en el extranjero, te pedirán credencial de residente, cosa que no tenemos y ya por ahí no la puedes recibir en otro país. No lo veo mal, partiendo de que en cierto modo es una forma de protegerte de fraudes, pero igual, deberían de tener una alternativa de verificación para hacerlo.
Normalmente en situaciones así, suelo alterarme y prenderle verguero a José Miguel por distraído. Pero en esta ocasión, creo que necesito más paz mental que enfocarme en ese problema, porque hay cosas mas fuertes pasando alrededor. De momento ya mañana irá a ver si la dejó en el supermercado (estoy ligando los dedos).
Francisca
Ay! OMG! Tambien pase por esas situaciones de perder la tarjeta… Es horrible. Y para recuperarla… Es mas horrible… (Como lo cuentas) En fin. Espero que todo se solucione. Busxar soluciones es lo mejor. Abrazos y exito!!!
Douglenis Rodriguez
Gracias por tu buena vibra. Ya veremos que podemos hacer
Andre
Sabes que yo hice este ejercicio de contar todo cuando tenía 12-13 años. Lo escuché de mi maestra de 6to grado, una forma de drenar tantas emociones en plena edad. De allí que me guste contar historias, aprender a escribir mejor y decidirme de adulta por el periodismo.