Mi viaje desde que comenzó el coronavirus, tuvo muchos cambios de planes inesperados. Es posible que te preguntes por que dejé Turquía para regresar a Venezuela.

La respuesta a eso es que realmente vivir en Turquía no estaba en el plan original. Según el plan original nosotros debimos haber dejado Turquía en junio del 2020.

Sin embargo, por el COVID no pudimos completar nuestro plan original de viaje y tras no encontrar soluciones en concreto a nuestra situación decidí quedarme junto con José Miguel por un rato largo en Turquía porque vimos lo barato de vivir allí.

Pero, luego de un tiempo, exactamente 1 año y medio después, mi padre murió y rápidamente los planes volvieron a cambiar y esta vez era el regreso a Venezuela por tiempo indefinido.

Las advertencias de regresar a Venezuela

Luego de tomar esta decisión, fueron muchas las personas que nos advirtieron que no volvieramos. Muchos decían que era mejor que nos quedáramos, pero también estaban los que decían venganse que aquí resuelven.

Hasta nos vimos todos los vídeos de Gabriel Herrera y Oscar Alejandro sobre cómo estaba Venezuela y nos preparamos psicológicamente para lo que se venía.

Teníamos claro que todo iba a ser un estrés con el tema de los dólares y el cambio de efectivo. También nos advirtieron que Venezuela estaba cara pero jamás imaginamos que podía ser tanto.

Así que el 5 de diciembre del 2021 a las 4:00 am emprendimos nuestro viaje a Venezuela saliendo primero al aeropuerto.

Nuestro vuelo era exactamente a las 10:15 am, pero nos fuimos temprano para prevenir cualquier cosa aunque nunca pensé que nos pasaría lo que nos pasó 🥵🥵🥵

Llegando al aeropuerto incorrecto

La noche antes de nuestro vuelo, teníamos que comprar los boletos del bus que nos llevaría al aeropuerto. Esa noche yo estaba leyendo los requisitos de entrada para España 🇪🇸.

Para ponerles en contexto, nuestro itinerario era así:

• Estambul – Madrid
• Madrid – Estambul (sí, otra vez)
• Estambul – La Habana (Ni nos bajamos del avión)
• La Habana – Caracas

Este itinerario fue así de loco porque para el momento que compramos los pasajes que fue en septiembre del 2021, esa ruta era más barata que volar directo desde Estambul a Caracas. Cabe destacar que no habían con escalas, los únicos vuelos que habían desde Turquía a Venezuela eran directos y solo por Turkish Airlines.

Entonces, la noche antes del vuelo comencé a leer que desde el 27 de noviembre del 2021 se habían empleado nuevas restricciones para la entrada de España porque había un nuevo brote y por eso impusieron nuevas medidas.

Las medidas no fueron muy claras en el sitio web, por lo cual yo me volví un ocho interpretando lo que decía y me estresé, me preocupé y de inmediato me dio ansiedad, taquicardia, tembladera y el síndrome del pesimista.

Estuve todo el rato pensando “nos van a devolver”, «no nos van a dejar pasar a España». Así que ya para ese momento yo estaba fuera de mi misma, full nervios y ansiedad.

Yo en medio de mi estrés comprando los pasajes del bus que me iban a llevar hasta el aeropuerto, pedí que se compraran los boletos del bus con dirección al Aeropuerto de Estambul, sin verificar en los boletos el aeropuerto correspondiente. Eso fue lo peor que pude hacer.

Para que se hagan la idea, en Estambul hay dos aeropuertos, uno queda del lado de Asia que se llama Sabiha Goksen y el otro queda del lado de Europa que se llama Aeropuerto de Estambul.

Mi vuelo salía desde el Sabiha Goksen, así que se podrán imaginar la magnitud de la cagada.

Cuando llegamos al Aeropuerto de Estambul y comenzamos a revisar las pantallas para ver a donde nos iban a hacer el check in, nos damos cuenta que el vuelo no aparece en las pantallas de salidas que tienen por todo el aeropuerto para verificar los vuelos.

José Miguel me pide revisar la reserva y lo primero que me dice al verlas es: “Realmente no entiendo como nos dejaron pasar” (esto lo dice porque debido al COVID, solo pueden entrar a los aeropuertos las personas con ticket de salida).

Pues cuando ve, el vuelo era en el otro aeropuerto, Sabiha Goksen, 😦 y cuando me lo dice, a mi se me fue la sangre del cuerpo, comencé a temblar y al revisar la distancia en el mapa, vimos que eran 69km de lejos. Se podrán imaginar el nivel de estrés que tenía.

Se necesitaba al menos 1 hora para llegar, eran para ese momento las 5:20 am.

Salimos corriendo con nuestro maletero que eran en total 6 maletas, 4 maletas de 28″ y dos bolsos de mano de 10 kilos cada uno, a agarrar un taxi.

Por suerte justamente se estacionó uno frente nuestro que era de maletero grande, así que aprovechamos, nos subimos a toda velocidad. A todas estas, yo estaba temblando de los nervios.

El señor nos cobró 380 liras el viaje + 110 liras por el costo del peaje en el puente que había que cruzar. Hizo un total de 36$. Nada mal debido a que el señor nos llevó en 45 minutos porque iba a 150km/h 🥵.

Era eso o perder todo un itinerario bien caro. Aun al recordarlo se me pone la piel de gallina.

Llegamos a las 6:10 am al Aeropuerto del Sabiha Goksen, justo iban comenzando a hacer check in, pero entonces aquí comenzó Cristo a padecer x2.

Pasaportes con prórroga no pueden hacer auto check in

Cuando llegamos al area del check in de PEGASUS, nos mandaron a hacerlo en las máquinas por nosotros mismos. Sin embargo, la máquina no pudo detectar nada al poner la prorroga en el sistema, por ese motivo nos mandaron a hacer el check in en los mostradores.

La cola era medio larga, asi que estuvimos mas o menos entre 15-20 minutos esperando hasta nuestro turno pero todo se puso aun más estresante cuando llegamos al mostrador y los pasaportes no pasaban.

La razón te la cuento en el próximo capítulo.